En el mundo del café de especialidad, la búsqueda por mejorar la calidad y los perfiles de sabor de cada grano nos lleva a explorar técnicas tradicionales que, aunque antiquísimas, siguen siendo efectivas en la actualidad. Una de estas prácticas principales en Café Burío es el uso de las camas africanas, una técnica de secado que tiene un impacto positivo en la calidad final del café.
¿Qué son las camas africanas?
Las camas africanas son estructuras elevadas, generalmente construidas con madera o bambú, destinadas a secar los granos de café después de la cosecha. Este método consiste en extender los granos de café en capas finas sobre una superficie plana, proporcionando un secado uniforme y una ventilación adecuada, asegurando que los granos se sequen de manera homogénea y eficiente.
¿Para qué sirven las camas africanas?
La principal función de las camas africanas es secar de forma controlada y uniforme los granos de café. El proceso es esencial para reducir la humedad del grano a niveles óptimos (alrededor del 11-12%), lo cual es crucial para evitar la proliferación de mohos, bacterias y otros contaminantes que puedan afectar la calidad y conservación del café. Además, las camas africanas facilitan el manejo del proceso de secado, permitiendo mover los granos con facilidad y reducir el riesgo de fermentaciones indeseadas.
¿Qué aportan las camas africanas al café?
El uso de camas africanas tiene múltiples beneficios que contribuyen a potenciar la calidad del café de especialidad:
- Secado uniforme: Al proporcionar una ventilación constante y distribuir los granos en capas finas, se evita la sobreexposición al sol en algunas áreas y la humedad atrapada en otras.
- Mejora en los perfiles de sabor: Un secado controlado y uniforme ayuda a preservar los compuestos aromáticos y a evitar sabores indeseados.
- Reducción de defectos: La ventilación y el manejo adecuado evitan la proliferación de mohos, ácaros y contaminación, asegurando que los granos se mantengan en óptimas condiciones.
- Aprovechamiento de las condiciones climáticas: En regiones donde el clima puede variar, las camas africanas permiten manejar el proceso de secado con mayor control y de forma sostenible.
Las camas africanas son una una técnica ancestral que, en manos de productores comprometidos con la calidad, puede marcar una gran diferencia en el perfil sensorial y en la calidad del café de especialidad. Como productores Café Burío, sigue explorando y perfeccionando técnicas tradicionales como esta, eso nos permite ofrecer al consumidor final cafés con perfiles únicos, frescura y la garantía de una producción responsable, sostenible y de alta calidad.